Disfrutando de la felicidad

Dicen que está en las pequeñas cosas de la vida. Dicen también de ella que nos acompaña en nuestro día a día aunque a veces lo haga a escondidas, en silencio, sin pronunciarse. La invocamos a diario pensando que se encuentra detrás de una cifra de varios ceros en nuestra cuenta corriente sin darnos cuenta de que, tal vez, se esconda tras una mirada o junto a un momento. 

Ella está en cada amanecer junto a la persona amada. Está también en esas conversaciones hasta altas horas de la madrugada o en los primeros pasos de quien está aprendiendo lo necesario para caminar por la vida. Alguien una vez le puso el nombre de FELICIDAD sin saber quizá que esas nueve letras iban a encerrar más de lo que nadie podría abarcar. Felicidad es todo y es nada a la vez. Su ausencia nos hace desgraciados pero su presencia no nos garantiza la dicha. 


Hoy celebra su Día Mundial, una jornada para reivindicarse como un derecho fundamental de todos. Porque todos, sin excepciones, tenemos que ser felices aunque a veces se nos olvide, aunque a veces no tengamos ni el tiempo ni las ganas necesarias para disfrutar de su presencia. Ella está ahí, siempre lo está, sólo hay que saber verla en los gestos. La felicidad no está en las grandes metas, está en los pequeños logros, en los pasos que vamos dando en el camino de la vida. 

La felicidad no es que una persona te la ofrezca como acto de generosidad. La felicidad es un bien individual y con él hacemos lo que nos venga en gana: o lo disfrutamos y exprimimos al máximo o dejamos que se marchite y termine por convertirse en polvo. La felicidad está pasar tiempo junto a esa persona, sí, pero también puede estar en nuestra soledad y en nuestro silencio en medio del caos. La vida te ofrece infinidad de oportunidades para coger de la mano tu felicidad y disfrutarla. 


Este viernes es el Día Mundial de la Felicidad según la ONU. Lo que las Naciones Unidas no saben que es la felicidad tiene ocupados todos los días del calendario. Ella es así. 

Si algún día la pierdes y no sabes dónde está, no ates lazos innecesarios ni pidas ayuda a los santos. Abre la ventana y grita, grita fuerte. Llora si crees que debes hacerlo hasta que ya no te queden lágrimas. Cierra la ventana. Lávate la cara y mírate al espejo. Sí, la felicidad está ahí. Ahora sal a disfrutarla. 

¡Feliz Día de la Felicidad a tod@s! 


"La felicidad es a veces una bendición, pero por lo general es una conquista"
(Paulo Coelho)

Comentarios

  1. La felicidad es como la buena suerte, sólo la conquista (parafraseando a Coelho) quien la trabaja. Esclarecedor post, Marta. Feliz felicidad!

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